Redacción: Roberto Jiménez-communicare.uanl.mx Fotografía: Club Tigres Oficial (vía Facebook)

Con un sueño mundialista en la mente, el conjunto dirigido por Robert Dante Siboldi, arrancó su aventura por el torneo de la CONCACAF, donde en su primer desafío se midieron frente al equipo de Vancouver, duelo que culminaría con un marcador de 1-1.

El equipo Universitario, no lograba encontrar su ritmo en el terreno de juego, lo que fue aprovechado por el conjunto local para adelantarse en el marcador al minuto 32. Damir Kreilach se convirtió en el héroe momentáneo para Vancouver, capitalizando una mala salida de la defensa auriazul y colocando el balón en el fondo de la red. El primer tiempo culminó con un 1-0 a favor del equipo canadiense, dejando a Tigres con la tarea de remontar en la segunda mitad.

La segunda parte reflejó una historia similar a la primera, con Tigres luchando por encontrar su juego y Vancouver defendiendo con determinación su ventaja. Sin embargo, conforme avanzaban los minutos, los felinos comenzaron a mostrar destellos de su calidad, creando oportunidades de gol que mantenían en alerta a la defensa local.

Fue en los minutos finales del encuentro cuando la magia del fútbol hizo acto de presencia, en el minuto 88, el «ser de luz» para los aficionados de Tigres, André Pierre Gignac, tomó la responsabilidad de ejecutar un tiro libre desde fuera del área. Con una precisión milimétrica y un potente disparo, Gignac logró vencer al portero rival y establecer la igualdad en el marcador, sellando así el destino del partido con un empate 1-1.

Si bien Tigres no logró llevarse la victoria en su debut en la CONCACAF, el valioso empate y gol de visita deja abiertas las puertas para que todo se defina en el estadio Universitario, en el duelo de vuelta, el cual se disputará el próximo 14 de Febrero.

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