Por Emilio Lucio.

Tres zarpazos fueron suficientes para que Tigres derrotara a León y continuar con su racha positiva.

Y para fieras, el guardameta de los felinos auriazules, Nahuel Guzmán, quien atajó un penal para mantener el cero en su portería, cuando el marcador aún estaba en ceros. Después de esta acción, los del bajío desaparecieron de la cancha y Tigres ya no tuvo rival. En contraste a lo que sucedía en la meta del conjunto de San Nicolás de los Garza, bajo los tres palos de León, Rodolfo Cota tuvo una desafortunada actuación y dos errores en el primer tiempo, sepultaron a los panzas-verdes.

André-Pierre Gignac aprovechó una salida de Cota, para tan sólo empujar el balón, después de un centro de Florian Thauvin al 22. Pocos minutos más tarde, Luis Quiñones recibió un pase filtrado por sector de la izquierda – con relación al ataque de Tigres -. Con un defensa cerrándole y con el balón botando, decidió impactar el balón, mismo que Rodolfo Cota no pudo controlar y se le escapó, incrementando la ventaja de la visita.

Para la segunda mitad, el asedio de Tigres continuaba y al 72, el campeón del mundo, Thauvin aprovechó una diagonal por parte del colombiano Quiñones, para así, tomar el 3 – 0 definitivo.

Con la victoria, Tigres llega a 20 puntos para afianzarse en el tercer puesto de la tabla general y declararse listo para el Clásico Regio, al cual llega con una racha de 7 partidos sin perder (6G – 1 E).